En el transcurso de la
vida vamos tomando decisiones, muchas de
ellas en nuestro diario vivir y otras que son un poco más compleja. Cada día tomamos decisiones como de que comer,
que vestir o a qué hora salir. Sin embargo, repercutan en nuestra vida. Ejemplo: No elegir comer saludablemente cada
día, afecta nuestra salud a largo plazo.
De ahí que no debemos subestimar nunca las decisiones que en apariencia
son insignificantes.
La vida está compuesta por las decisiones que temamos, es por eso que debemos elegir el camino correcto. El camino correcto dependerá de la sabia decisión hecha en el momento.
<<Hay caminos que al hombre le parece derecho; pero su fin es camino de muerte.>> Proverbios 14:12
Al momento de tomar una decisión debemos tener en cuenta estos 4 principios:
1-Buscar
la voluntad de Dios: Para mí es lo primero, pedir dirección
a Dios es algo que debemos tomar en cuenta. El Señor sabe el resultado final de
las cosas, por eso dejar que sea él quien te dirija será la mejor opción.
<<Encomienda al Señor tu camino; confía en él, y él actuará>>. Salmos 37:5
2-Evita
la presión de grupo: Nunca tomas decisiones bajo presión de
otros, antes de tomarlas debe estar en paz, si te impulsa a tomar una decisión
y sientes duda lo mejor es no hacerlo.
3-Toma
decisiones que se acerquen a tus valores: Si tienes claros cuáles son tus valores personales tienes una guía de prioridades de vida, en la que puedes basar a la hora de tomar decisiones difíciles.
"Sabes que estás en el camino correcto cuando a casa paso sientes la alegría de vivir". (Jodorowsky)
4-
Y por último, No temas: Ten claro que tomar decisión no
significa llegar a ella hasta el fin. Si
ves que no da los resultados esperado no te desanime aprende a modificar lo que
habías planeado. El éxito muchas veces es fruto del fracaso. Tener éxito consiste en levantarse una vez más de las veces que se haya caído.
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